Fotografía: New born / 35awards
Hoy abrimos una nueva sección en nuestro blog, llamada «Flora News», hoy os hablaremos un poco del reciente artículo publicado en el país: «un país sin hijos: Radiografía de la baja natalidad en España» donde el periodista Jesús Rodríguez analiza las distintas causas de la baja natalidad, lo que se ha convertido en un problema en nuestro país durante los últimos años y que cada vez va más a peor, en lugar de mejorar.
Los jóvenes en España no forman familias:
En este articulo se menciona que los jóvenes en España (es decir las personas entre 14 y 29 años) son menos que nunca, poco más de siete millones, cuando eran más de diez en 1995 (las personas mayores de 65 años son, por el contrario, más de nueve millones). Es decir somos un país con más viejos que jóvenes, y además el nivel de desempleo en los jóvenes roza el 30%, aunque más de la mitad ha ido a la Universidad. También alcanzan muy tarde su autonomía: no abandonan el hogar familiar hasta los 30 años (en Suecia lo hacen a los 18 y en Francia a los 23). El motivo principal es la falta de vivienda para poder independizarse.
Cada vez es más difícil encontrar pareja:
Además, paradójicamente, en un mundo hiperconectado, les resulta cada vez más difícil encontrar una pareja con la que comprometerse en el objetivo común de la crianza. Muchas mujeres lo hacen en solitario, con un modelo monoparental que ya representa más de un millón de hogares en España, según Carmen Flores, presidenta de la federación que las agrupa: “Somos 1.830.000 personas; más del 10% de las familias con menores de este país, y el 83% está a cargo de una mujer.
“Las mujeres hoy somos más exigentes”, reflexiona durante el debate Sonia Juan, de 27 años, educadora social. “Buscamos relaciones sanas. Reclamas un estándar de corresponsabilidad en el cuidado de los hijos que no estamos encontrando; que haya en el hogar dos proveedores y dos cuidadores. En igualdad». Cosa que no vemos mal, pero que cada vez genera más presión en las mujeres a la hora de tomar la decisión de ser Madres, pues en su mayoría no todas están dispuestas o se sienten preparadas para ser madres solteras.
Tenemos una visión pesimista del futuro:
Pero, al mismo tiempo, cuando vas a una entrevista de trabajo, quieren saber si entra en tus planes quedarte embarazada. Y cuando dices que sí, te rechazan. ¿En qué quedamos? La maternidad te penaliza. Te callas. Y aplazas y aplazas y aplazas el momento de ser madre”.
“Si una sociedad tiene una visión pesimista de su futuro, no tiene hijos”, resume Teresa Jurado, profesora del departamento de Sociología de la UNED, “por eso, en realidad hablamos de una infecundidad involuntaria más que voluntaria.
Hay gente que quiere y no puede. Y tenemos que conseguir que quien quiera, pueda. Sin meternos en su vida. En libertad. Respetando sus derechos. Sin pasos atrás. Hay que promover la fecundidad y, al mismo tiempo, la igualdad de género. Esa es la clave.
Desde nuestro programa Yo Soy Flora, es lo que hacemos, promover la fecundidad, porque como hemos podido ver en los últimos años, cada vez el problema de la infertilidad sigue creciendo, hasta el punto de convertirse en una crisis demográfica que amenaza cada vez más con la desaparición de poblaciones en todo el mundo. Y es por esto que la reproducción asistida y en especial la donación de óvulos, se presentan como una opción para combatir con el creciente problema de la infertilidad y la crisis demográfica.
La baja natalidad es un fenómeno que España comparte con otras naciones del entorno mediterráneo, como Italia, Portugal, Grecia, Chipre o Malta. Es una historia triste, la de una frustración.
Hubo un tiempo en que se definía a la Bolsa como el termómetro de la economía de un país; la persistente bajísima fecundidad es un termómetro que alerta de que algo no funciona bien en una sociedad: la ausencia de oportunidades y la desigualdad de género. Un binomio que afecta al bienestar y al cumplimiento de las expectativas. “Si la brecha entre lo deseado y lo real es tan grande, esa situación nos habla de las carencias de una sociedad”, explica la demógrafa Mariona Lozano, del Centro de Estudios Demográficos (CED), “una sociedad que no tiene hijos, no se quiere lo suficiente, y eso es responsabilidad de la sociedad, no de las mujeres”.
La frustración. Esa es la crisis existencial que se deriva de la baja natalidad. El reverso es la crisis económica que puede desencadenar un mundo sin jóvenes. En ese escenario, los agoreros hablan de una sociedad menos emprendedora, innovadora y dinámica; con una caída del consumo y la inversión; con más impuestos; con menos ideas y empuje; con un desequilibrio entre activos y pasivos, y un serio problema de sostenibilidad para pagar las pensiones, la sanidad y los cuidados. Y financiar la deuda pública.
¿Cómo se soluciona?
—En principio, con políticas que mejoren ese escenario (como la ley de reforma del mercado laboral). Y, al tiempo, hay que combinarlo con apoyos a las familias y permisos por paternidad y maternidad más largos. Y habrá que repensar la política migratoria.
La mujer se juega todo en cinco años de fertilidad, de los 30 a los 35. Y a partir de esa edad, juega con fuego. Hay que proteger los años clave de la mujer, lo que sucede es que en ese espacio de tiempo tiene todo lo material en contra. Y cuando pasa la tormenta, ha cumplido los 40.
Por eso es muy importante tener en cuenta la donación de óvulos en esta instancia, ya que esta es una técnica de reproducción asistida, donde una mujer dona sus óvulos para que otra mujer pueda quedar embarazada. Es el acto de gran generosidad que tiene una mujer para que otra tenga la posibilidad de cumplir su sueño de ser madre, ya ella no puede hacerlo de forma natural y lo puede hacer hasta un poco más de los 40 años.
Con su donación de óvulos, no solo ayudan a la reproducción asistida y al aumento de la Natalidad; también llevan esperanza, alegría y mucho amor a hogares que tanto desean traer un niño al mundo.
Por eso es tan valioso para nosotros, nuestras donantes, nuestras Floras. Porque no solo representan la Vida en sí misma, sino que también representan el futuro de un país o de varios.
Porque un mundo sin niños, es un mundo sin futuro…
Si queréis conocer más información sobre la donación de óvulos, podéis visitar nuestra página web, o escribir al número de WhatsApp: 657303780 o contactarnos por el medio de vuestra preferencia.