Todo en la tierra tiene sus ciclos, el agua que puede ser gas, liquido o solido. Incluso la Vida misma tiene un comienzo y un final y aun así luego de que morimos de algún modo volvemos a la tierra, el embarazo de todas las especies también es un ciclo maravilloso.
La luna tiene su fase también y por muchos años fue asociada a la feminidad pues si ciclo es muy similar a nuestro ciclo menstrual, y es que además nuestro ciclo menstrual también tiene sus fases.
Y por eso, las mujeres también somos parte de un ritmo, de un ciclo del todo, somos parte de ello, nosotras y nuestros cuerpos y abrazar ese ritmo, y aceptar nuestra naturaleza cíclica y maravillosa, es el primer paso para mejorar nuestra salud y nuestra calidad de vida.
Durante una conferencia de antropología en la universidad, una profesora mostró una imagen de un hueso de asta que tenía 28 marcas. “La gente solía pensar que este era el primer calendario hecho por un hombre”.
Luego compartió un pensamiento, “¿Por qué un hombre marcaría un ciclo de 28 días? ¿Tal vez esto era una forma temprana de llevar un registro del ciclo mensual de una mujer?” y es que para la mayoría de las mujeres es muy normal hacer esto, está dentro de todas nosotras.
Esta revelación destaca algo importante: las mujeres siempre han estado profundamente conectadas con sus ciclos y con su fertilidad, quizás desde hace tanto como 20,000 años, y este hueso era la prueba de ellos.
Pero en el ajetreo y el bullicio del mundo actual, muchas mujeres han olvidado o dejado de lado la importancia de sus ciclos, muchas por ajetreo de la vida diaria, de la rutina, de la modernidad y de nuestros ajetreados días, hemos olvidado como conectarnos con nosotras misma a un nivel tan profundo y sencillo como nuestro ciclo menstrual.
Al contrario, nos encontramos luchando en contra de él, no aceptamos que tenemos nuestros ritmos, no aceptamos que nuestras hormonas son como el mar siempre fluyendo y en cantidades diferentes dependiendo del día o momento del mes.
En otros artículos hemos hablado un poco, sobre el ciclo menstrual, ¿Qué ocurre en nuestros cuerpos durante el ciclo menstrual? y sobre por qué somos de los poquitísimos mamíferos que tienen menstruación, así de como adaptar nuestra dieta dependiendo del día del mes que estemos.
“Es esencial recordar que nuestros ciclos juegan un papel enorme en nuestro bienestar, estado de ánimo e incluso en la forma de nuestro cuerpo”, – como destaca la Dra. Rebecca Micheals, una experta líder en salud femenina y menopausia.
A menudo le digo a mis pacientes, “Nosotras las mujeres tenemos un ciclo único, a diferencia de la rutina diaria de un hombre. Debemos abordar nuestra salud de manera diferente”.
¿Alguna vez has sentido que tu cuerpo trabajaba en tu contra al intentar perder peso y volver a sentirte como en tu juventud? “¿Como si la báscula y tu cuerpo tuvieran algún pacto secreto?
Créeme, he escuchado esto de innumerables mujeres que vienen a mí. Pero aquí está la verdad: tu ciclo, una parte profunda de tu feminidad, podría ser la clave”.
“Muchas mujeres que luchan por mejorar su salud o perder peso pasan por alto la importancia de sus ciclos menstruales.
Sin embargo, este ciclo es la esencia misma de lo que nos hace mujeres y juega un papel significativo en cómo nuestros cuerpos reaccionan a varios estímulos, incluida la dieta”. Incluso hasta la manera de como te relacionas con otros o con diferentes estímulos.
“Además, a lo largo de los años, las mujeres experimentan naturalmente cambios en la composición de su cuerpo, a menudo llevando a un aumento de peso, en gran parte debido a fluctuaciones hormonales.
Mientras que la menopausia puede intensificar esta tendencia, introducir el ayuno basado en el ciclo de una puede ser transformador para la vida de cualquier mujer”. – dice Rebecca.
El cuerpo de una mujer todavía tiene sus ritmos, y entenderlos es fundamental para vivir mejor, las mujeres deberían abrazar estrategias que se alineen con los ritmos naturales de su cuerpo, no luchar contra ellos.
El ciclo menstrual es una expresión de la vida, de la creatividad y de la conexión con la naturaleza. Cada mes, nuestro cuerpo experimenta cambios físicos, emocionales y energéticos que nos invitan a adaptarnos y aceptar nuestra realidad cambiante.
Sin embargo, muchas veces vivimos este proceso con incomodidad, dolor o rechazo, sin reconocer el valor y el potencial que tiene para nuestro bienestar y desarrollo personal.
Por eso os queremos compartir algunos consejos de cómo adaptarnos y aceptar la naturaleza rítmica y cíclica del ciclo menstrual, para que puedas vivirlo con más armonía, conciencia y gratitud:
1. Conoce tu ciclo: El primer paso para adaptarnos y aceptar nuestro ciclo menstrual es conocerlo. Cada mujer tiene un ciclo único, que puede variar en duración, intensidad y síntomas. Para conocer tu ciclo, te recomiendo llevar un registro diario de cómo te sientes física, emocional y energéticamente en cada fase: menstruación, pre-ovulación, ovulación y pre-menstruación. Así podrás identificar tus patrones, tus necesidades y tus recursos en cada momento.
2. Respeta tu ritmo: El segundo paso para adaptarnos y aceptar nuestro ciclo menstrual es respetar nuestro ritmo. Cada fase del ciclo tiene una energía diferente, que nos pide actuar de acuerdo a ella. Por ejemplo, la menstruación es una fase de introspección, descanso y limpieza; la pre-ovulación es una fase de acción, creatividad y sociabilidad; la ovulación es una fase de expresión, fertilidad y sensualidad; y la pre-menstruación es una fase de reflexión, evaluación y cierre. Para respetar nuestro ritmo, debemos escuchar nuestro cuerpo y nuestras emociones, y ajustar nuestras actividades, hábitos y relaciones a lo que nos pide cada fase.
3. Aprovecha tu potencial: El tercer paso para adaptarnos y aceptar nuestro ciclo menstrual es aprovechar nuestro potencial. Cada fase del ciclo nos ofrece unas cualidades y unas oportunidades que podemos utilizar para nuestro crecimiento personal y profesional. Por ejemplo, la menstruación es un momento ideal para meditar, soltar lo que ya no nos sirve y conectar con nuestra intuición; la pre-ovulación es un momento ideal para iniciar proyectos, resolver problemas y aprender cosas nuevas; la ovulación es un momento ideal para comunicarnos, colaborar con otros y disfrutar de nuestra sexualidad; y la pre-menstruación es un momento ideal para revisar nuestros objetivos, hacer cambios necesarios y expresar nuestra autenticidad.
4. Acepta tu sombra: El cuarto paso para adaptarnos y aceptar nuestro ciclo menstrual es aceptar nuestra sombra. Nuestro ciclo menstrual no solo nos muestra nuestra luz, sino también nuestra oscuridad. Es decir, aquellos aspectos de nosotras mismas que nos cuesta reconocer, aceptar o integrar. Por ejemplo, nuestros miedos, nuestras heridas, nuestras inseguridades o nuestras frustraciones. Estos aspectos suelen aflorar con más fuerza en las fases de menstruación y premenstruación, cuando nuestra sensibilidad está más agudizada. Para aceptar nuestra sombra, debemos mirarla con compasión, sin juzgarnos ni criticarnos, sino entendiendo que forma parte de nuestro ser y que tiene un mensaje para nosotras.
5. Celebra tu ciclo: El quinto paso para adaptarnos y aceptar nuestro ciclo menstrual es celebrarlo. Nuestro ciclo menstrual es un regalo de la vida, que nos permite experimentar diferentes facetas de nosotras mismas, crear vida dentro y fuera de nosotras, y sintonizar con los ciclos de la naturaleza. Para celebrar nuestro ciclo menstrual, podemos hacer rituales, ceremonias o fiestas con otras mujeres o con nosotras mismas, en las que honremos nuestra sangre sagrada, nuestra fertilidad creativa y nuestra sabiduría cíclica.
Espero que estos consejos te ayuden a adaptarte y aceptar tu ciclo menstrual con más amor, respeto y alegría. Recuerda que tu ciclo menstrual es tu aliado, tu guía y tu maestro. Cuanto más lo conozcas, lo respetes, lo aproveches, lo aceptes y lo celebres, más te conocerás, te respetarás, te aprovecharás, te aceptarás y te celebrarás a ti misma.
Y recuerda somos hijas de la luna, hermanas del agua, madres de la tierra, somos seres cíclicos, que cambian y se transforman con el paso del tiempo. Somos parte de un todo, de una armonía, y de una danza cósmica e universal.
Nosotras tenemos nuestro ciclo menstrual, que se sincroniza con el ciclo lunar, nuestro ciclo menstrual es una expresión de nuestra naturaleza femenina, de nuestra creatividad, de nuestra sabiduría y está en todas nosotras el poder aprovecharlo y usarlo a nuestro favor.
Reconocer y respetar nuestro ciclo menstrual es una forma de conectarnos con nosotras mismas, con nuestro cuerpo y con nuestro entorno. Es una forma de honrar nuestra esencia cíclica y maravillosa. Es una forma de mejorar nuestra salud y nuestra calidad de vida, es una forma de ser grandiosas, maravillosas y mágicas.
Aquí te compartimos también un video, para que puedas entender de manera más visual los cambios que experimenta tu cuerpo:
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